La hepatitis es una inflamación del hígado que puede ser causada por virus, sustancias tóxicas o enfermedades autoinmunes. Existen varios tipos de hepatitis viral, pero los más comunes —y prevenibles— son los tipos A, B y C. Cuidar tu hígado a largo plazo implica tomar medidas desde hoy, incluyendo vacunarte cuando sea necesario.
Hepatitis A: prevención con higiene y vacuna
Este tipo se transmite principalmente por alimentos o agua contaminada. Aunque suele ser leve, puede provocar síntomas intensos y afectar el bienestar general. La vacuna contra la hepatitis A es segura y eficaz, y se recomienda especialmente si se viaja a zonas con alta incidencia.
Hepatitis B: una vacuna esencial
La hepatitis B se transmite por contacto con sangre o fluidos corporales. Puede volverse crónica y causar daño hepático progresivo, cirrosis o cáncer de hígado. La vacuna es parte del esquema infantil, pero si no la recibiste de niño, puedes aplicártela en la edad adulta. Es fundamental para trabajadores de la salud, personas con enfermedades hepáticas o quienes tengan conductas de riesgo.
Hepatitis C: prevención sin vacuna
Aunque no existe vacuna contra el virus de la hepatitis C, se puede prevenir evitando el contacto con sangre infectada, no compartiendo objetos punzocortantes y mediante pruebas regulares si hay factores de riesgo. Si se detecta a tiempo, el tratamiento actual puede curarla en la mayoría de los casos.
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Cuidar el hígado también implica…
Además de las vacunas, es importante mantener una alimentación equilibrada, evitar el exceso de alcohol y automedicarse con responsabilidad. Realizar chequeos médicos periódicos ayuda a detectar signos de inflamación hepática o infecciones virales antes de que generen complicaciones.
Proteger tu hígado no es sólo una decisión del presente, es una inversión para tu salud futura. Las vacunas disponibles representan una de las herramientas más efectivas para prevenir enfermedades hepáticas graves, y mantenerte informado es parte de ese cuidado.
Fuente: Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC)