Reducir la exposición a los microplásticos en la vida diaria es posible con pequeños cambios prácticos. Aquà tienes consejos sencillos y efectivos para minimizar el contacto con estos diminutos fragmentos de plástico:
- Usa botellas y envases reutilizables
Evita las botellas de agua desechables y los envases plásticos de un solo uso. Opta por botellas de acero inoxidable o vidrio, y lleva tuppers reutilizables para comida. Esto reduce la cantidad de microplásticos que pueden desprenderse de envases plásticos al calentarse o degradarse, y que terminan en tu agua o alimentos. - Elige ropa de fibras naturales
La ropa sintética (como poliéster, nylon o acrÃlico) libera microfibras plásticas al lavarla. Prefiere prendas de algodón, lana o lino. Si usas ropa sintética, considera una bolsa de lavado especial que atrapa las microfibras para que no se vayan por el desagüe. - Evita productos con microperlas
Revisa las etiquetas de cosméticos, como exfoliantes, pastas de dientes o geles, y evita los que contengan «polietileno» o «polipropileno», que son microplásticos. Busca alternativas con ingredientes naturales, como azúcar o cáscaras de nuez, que hacen el mismo trabajo sin contaminar. - Filtra el agua que bebes
El agua del grifo y la embotellada pueden contener microplásticos. Usa un filtro de agua de buena calidad, como los de carbón activado o sistemas de ósmosis inversa, para reducir las partÃculas. También evita calentar agua en recipientes plásticos, ya que el calor libera más microplásticos. - Reduce el consumo de alimentos procesados y mariscos
Los microplásticos están en alimentos como pescado, mariscos, sal marina y productos muy procesados. Come más frutas, verduras frescas y alimentos de origen local, y elige pescado de fuentes sostenibles con menor contaminación. Cocinar en casa con ingredientes frescos también ayuda a bajar la exposición. - Apoya el reciclaje y menos plástico desechable
Separa tus residuos y recicla todo lo que puedas para evitar que los plásticos se rompan en microplásticos en el ambiente. Lleva bolsas reutilizables al súper y di no a pajitas, cubiertos o vasos plásticos. Cada pequeño esfuerzo cuenta para reducir la contaminación.
Estos pasos son fáciles de incorporar en tu dÃa a dÃa y no solo te ayudan a protegerte, sino también al planeta. ¡Pequeños cambios hacen una gran diferencia!