INSUFICIENCIA RENAL

  ¿QUÉ BENEFICIOS OBTENGO DE LA ACTIVIDAD FÍSICA?
1 El ejercicio físico cotidiano es una buena medida para la prevención y el tratamiento de la enfermedad cardiovascular y la enfermedad renal.
2 El ejercicio físico reduce el colesterol malo, la presión arterial y el dolor de articulaciones, y aumenta el colesterol bueno.
3 El ejercicio físico mejora la autoestima, el estado de ánimo y la calidad del sueño, además de que fomenta la interacción social.
 
 
  ¿QUÉ RECOMENDACIONES HAY PARA MÍ?
1 Hacer ejercicio físico como caminar, nadar o trotar durante al menos 15 minutos tres veces a la semana es recomendable en los pacientes con enfermedad renal crónica.
2 Es importante que cada sesión de ejercicio incluya un calentamiento y un enfriamiento de 5 a 10 minutos cada. En dicho calentamiento, la actividad aeróbica debe ser de baja intensidad.
3 Procura utilizar las escaleras en lugar del elevador, y caminar 3 cuadras antes de llegar a tu trabajo.
4 Antes de comenzar un programa de actividad física es importante que lo consultes con un médico.
5 Recuerda la importancia de que tus metas de control incluyan la realización de actividad física y una alimentación adecuada.


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