El promedio es de 3,200 gramos al nacer, si bien el peso adecuado puede variar entre 2,500 y 4,000 g.
Debes saber que en los primeros días de vida hay una pérdida natural de peso.

De manera ideal, el bebé debe aumentar alrededor de 600 gramos de peso este primer mes.

Si Nicolás pesa MENOS de 2,500 gramos y/o NO AUMENTA alrededor de 600 g en los primeros 30 días, es posible que haya un problema de mala alimentación o de asimilación del alimento, lo que lo pone en riesgo.
Si pesa MÁS de 4,000 g o AUMENTA más de 600 g, Nicolás debe ser valorado.
En todos los casos, si hay una diferencia significativa en la evolución será necesario consultar al médico de inmediato.

El promedio es de 50 centímetros, con un rango entre 48 a 53 cm.

Idealmente debe aumentar unos 4 centímetros el primer mes.

Axilar:  36.5° a 37 °C 
Rectal: 37° a 37.5 °C

Si observas cualquier variación,consulta inmediatamente al médico.

0 a6 meses

Leche materna

Libre consumo: lo que el bebé pida

El médico tiene que...

• Hacer una revisión completa (exploración clínica).
• Valorar si existen indicios de algún problema al nacimiento.
• Evaluar las condiciones en que ocurrió el nacimiento.
• Revisar los resultados del tamiz neonatal.
• Verificar que se haya aplicado la vitamina K.
• Recetar vitaminas A, C y D (el bebé debe consumir las tres vitaminas durante los primeros 6 meses en la dosis indicada por el médico).

Signos de alerta
Consulta al médico 
inmediatamente

• Sangrado del cordón umbilical o salida de pus del mismo.
• Fiebre o hipotermia (temperatura baja, es decir, menor de 36.5°C).
• El bebé rechaza el pecho.
• Flacidez del cuerpo (el bebé está aguadito) o llanto débil.
• Cambios de color en la piel (palidez, cianosis o color azulado, ictericia o color amarillo).
• Dificultad para alimentarse al pecho o con biberón.
• No ha requerido más de tres cambios de pañal en el día.
• Vómitos.
• Llanto constante.
• Ausencia de evacuaciones, inflamación abdominal o presenta diarrea.
• El bebé pierde en los primeros días más del 10% del peso con que nació.

La cantidad de leche que una madre produce llega a su punto óptimo cuando se permite al bebé amamantar tantas veces como lo necesite.

Los niños nacen programados para comer, dormir y tener periodos de vigilia. No se trata de un comportamiento desorganizado, sino que este es un reflejo de las necesidades únicas de cada recién nacido. Con el transcurso del tiempo, el bebé se adaptará gradualmente al ritmo de vida en su nuevo ambiente sin precisar entrenamiento ni ayuda para ello.

Lo importante en esta etapa es lograr una vinculación afectiva adecuada los padres y la familia, ya que ello será la base de las relaciones interpersonales futuras del bebé. Cárgalo, juega con él, platícale.

El recién nacido no requiere agua, jugos o agua hervida con azúcar o hierbas, ya que éstas disminuyen la absorción de nutrientes de la leche materna; además de ello, el intestino no está preparado al principio para recibir alimentos distintos de la leche materna o leches artificiales maternizadas.

Al vestir al bebé, se recomienda agregar una prenda más de la cantidad de ropa que usan los padres. En el hogar, la cantidad de ropa que se usa se determina según la temperatura de la casa.

El bebé es capaz de succionar y deglutir, pero aún no ha desarrollado la capacidad de digerir ciertas proteínas y sus riñones no están completamente desarrollados. Por lo anterior, el único alimento que debe recibir es leche materna o maternizada.

Leche materna: consumo libre de leche  materna

Se van introduciendo alimentos no lácteos, preparados de forma  adecuada en consistencia y cantidad. También puede consumir agua a libre demanda, siempre y cuando sea hervida.

Además de la leche materna, cereal de hojuelas preparado con 200 ml de leche adicional (5 cucharadas de leche más 5 cucharadas soperas de hojuelas de cereal de arroz o avena) o puré de fruta cocida y molida (manzana, pera, plátano, papaya). No debes obligar al bebé a que se acabe todo.

Incorporación gradual de alimentos semisólidos.

Puré de verduras y carnes bien cocidas y molidas.

Incorporación de pequeñas cantidades de alimento sólido para que el bebé aprenda a comer en el sentido más amplio del término, desde la masticación hasta la adquisición de hábitos alimenticios correctos.

Carnes, verduras y frutas bien cocidas  y molidas de manera más gruesa (con trocitos sólidos muy pequeños).
Evitar el huevo antes del año de edad ya que puede provocar alergías.

• medir el peso, la talla y el perímetro de la cabeza (craneal).
• valorar que no haya problemas en los ojos (que no haya estrabismo, es decir, desviación de uno o ambos ojos, que los ojos tengan reflejos normales y que el bebé siga la luz de una linterna y los objetos con los ojos).
• explorar la existencia de anomalías de cadera o luxación congénita de cadera (limitación en el movimiento de  su cadera/muslo), así como la presencia de asimetrías en la longitud de las piernas y en los pliegues glúteos.
• evaluar el desarrollo psicomotor: respuesta a estímulos, capacidad de sonreír, capacidad de sostener la cabeza por varios segundos, sostener objetos en las manos por algunos segundos y vocalizar sonidos con la letra g (agú).

Dos meses:

• Persistencia de irritabilidad
• Sobresalto exagerado ante ruido
• Ausencia de sonrisa social

Tres meses

• Asimetría en la actividad de las  manos (no puede hacer la misma cosa con las dos manos al mismo tiempo).
• No sigue con la mirada.
• El niño no responde frente al estímulo de los sonidos.
• El niño no sostiene la cabeza.

• medir el peso, la talla y el perímetro de la cabeza.
• evaluar el desarrollo psicomotor.

• Pasividad excesiva.
• Puños de las manos continuamente cerrados.
• No emite risas sonoras.
• No se orienta hacia la voz que escucha.

• medir el peso, la talla y el perímetro de la cabeza.
•  evaluar el desarrollo psicomotor.
• comprobar la fijación de cada ojo por separado; constatar que no haya estrabismo y otros defectos oculares.
• preguntar a los padres sobre la reacción del niño ante estímulos de sonido/lenguaje.
• verificar que hayan salido los dientes y descartar la presencia de malformaciones dentales.
• revisar el aspecto de los genitales y la simetría del escroto; comprobar que ambos testículos estén en la bolsa escrotal.

• Rigidez en las piernas.
• El niño no rota sobre sí mismo.
• No intenta permanecer erguido apoyándose de algo o de la mano de un adulto.
• No presiona los objetos voluntariamente.
• No balbucea ni hace “gorgoritos”.
•  Tiene una respiración rápida, agitada o ruidosa.
• Mantiene un llanto agudo inusual o llora en forma continua por más de tres horas.
• Muestra una somnolencia excesiva (busca dormir todo el tiempo).
• Aumento anormal en el número de evacuaciones (mayor frecuencia de la que se observa regularmente).

• medir el peso, la talla y el perímetro craneal.
• evaluar el desarrollo psicomotor.
• comprobar que ambos testículos estén en la  bolsa escrotal; el testículo retráctil o en ascenso requiere supervisión.

• No se pone de pie, ni intenta caminar.
• No tiene vocabulario de dos palabras con/sin significado.
• No entiende órdenes sencillas.
• Tiene una respiración rápida, agitada o ruidosa.
• Mantiene un llanto agudo inusual o llora en forma continua por más de tres horas.
• Tiene una somnolencia excesiva o duerme demasiado.
• Aumento anormal en el número de evacuaciones (mayor frecuencia de la que se observa regularmente).

La sopa hace fuerte al niño.

La creencia y la práctica de dar sopitas o calditos suele ser perjudicial pues la realidad es que las sopas o caldos no tienen los suficientes nutrientes y calorías para alimentar y lo que en realidad harán es impedir que el bebé coma adecuadamente.

La leche no sirve si es muy clarita.

La leche materna es más clarita que la leche de vaca, especialmente la que sale durante los primeros minutos cada vez que el bebé succiona; sin embargo, se trata de una leche producida según las necesidades del bebé, con menos grasa que la leche de vaca y muchísimas proteínas para la generación de defensas en el cuerpo del niño.

Si un niño no aumenta bien de peso, es posible que la leche de su madre sea de baja calidad.

Los estudios demuestran que aun las mujeres desnutridas son capaces de producir leche de suficiente calidad y cantidad para cubrir las necesidades de crecimiento del niño. En la mayoría de los casos, el escaso peso se debe al consumo insuficiente de leche materna o a un probable problema orgánico del niño.

La estimulación temprana es sólo para niños talentosos o especialmente dotados.

Todos los bebés necesitan vivir experiencias nuevas para enriquecer su desarrollo cerebral y emocional. Los niños aprenden haciendo las cosas y realizando actividades estimulantes. De ahí la importancia de ofrecerles la oportunidad de explorar el mundo, exponerlos a nuevos desafíos y alentarlos a ser creativos.

Es chiquito y no entiende.

Todo lo contrario: neurológicamente, su cerebro madura en forma asombrosa. El bebé entenderá una sonrisa, una caricia, un cambio en el tono de voz, una expresión suave y un reto. Si el adulto es capaz de explicar con palabras sencillas 'lo que ocurre', el niño se mostrará empático y comprenderá la situación relatada.

BCG

Tuberculosis

Única

Al nacer

Hepatitis B

Hepatitis B

Primera

Al nacer

Segunda

2 meses

Tercera

6 meses

Pentavalente 
acelular
DPaT +VPI+Hib

Difteria 
Tos ferina
Tétanos
Poliomielitis
Infecciones por haemophilus

Primera

2 meses

Segunda

4 meses

Tercera

6 meses (hay un refuerzo más a los 18 meses; ver manual correspondiente)

Rotavirus

Diarrea por rotavirus

Primera

2 meses

Segunda

4 meses

Neumocóccica conjugada

Infecciones por neumococo

Primera

2 meses

Segunda

4 meses

Refuerzo

12 meses

Influenza

Influenza

Primera

6 meses (hay refuerzos anuales; ver manual de 1 a 5 años)

Segunda

 7 meses

SRP

Sarampión
Rubeola
Parotiditis

Primera

1 año

Nunca le des medicamentos o remedios caseros sin haber consultado antes con su médico.

Asegúrate de que las sustancias tóxicas tales como, por ejemplo, los detergentes, el cloro, los solventes, los insecticidas y la gasolina estén bien cerradas y fuera del alcance para evitar que las ingiera.

Procura no dejar a su alcance cubetas con agua y bolsas de plástico.

Evita que gatee en la cocina, estacionamientos, cerca de escaleras, en la azotea y cerca de escaleras.

Mantén fuera de su alcance objetos pequeños que se pueda tragar, u objetos que puedan hacerle daño, tales como cuchillos, ventiladores, metales oxidados, trozos de madera, vidrios, cosas sucias, etc.

No permitas que se le acerque demasiado ningún animal doméstico.

Puedes evitar quemaduras cuidando que no se acerque a objetos calientes como planchas, velas, ollas, anafres, fogatas, etc.

Si te es posible, recubre los contactos eléctricos.

Revisa y mantén limpio el lugar donde duerme para evitar picaduras o mordeduras de animales.

Deshidratación

Pérdida de líquidos y sales minerales.
Síntomas
Resequedad de la boca, ojos hundidos, falta de energía, somnolencia o palidez.

Dale líquidos y suero oral con frecuencia y en pequeñas cantidades. Hazlo con una cucharadita.
Consulta al médico.

Insolación

Aumento de la temperatura en el cuerpo ocasionado por la exposición al sol. 
Síntomas
Debilidad, mareo, deshidratación, dolor de cabeza, poca sudoración, poca orina, vómito y/o adormecimiento del cuerpo.

Coloca al bebé en un lugar con sombra y ventilado.
Refresca su cuerpo con fomentos de agua en la nuca, la cabeza, la cara y el pecho. 
Si después de 30 minutos no ves mejoría y aparece fiebre, dificultad para respirar, vómito, pérdida del conocimiento o convulsiones, será necesario que lo lleves inmediatamente con el médico.

Quemaduras

Lesión en la piel causada por fuego, objetos o líquidos calientes, agua hirviendo, sol o sustancias químicas. 
Existen diferentes tipos de quemaduras: 
Primer grado: hacen que la piel se ponga rojiza y haya ardor. 
Segundo grado: presentan ampollas. 
Tercer grado: son más graves pues afectan la piel, los  músculos y los tejidos.

En el caso de quemaduras de primer y segundo grado: 
Aplica agua fría hasta que el dolor se calme. 
No es conveniente que cubras la herida con gasas o vendas, ya que la piel necesita respirar. 
No apliques remedios caseros como pomadas, aceites, mostaza, pasta de dientes u otros. 
La aplicación de cremas refrescantes sólo podrá hacerse cuando la quemadura haya sido por exposición al sol. Si se han formado ampollas no las revientes, es mejor consultar al médico. 
Las quemaduras de tercer gradorequieren de atención médica inmediata.

Mordeduras y piquetes de animales

Lesiones provocadas por algún animal o insecto. 
Síntomas
Ronchas, enrojecimiento, ardor, comezón, dolor.

Aplica fomentos de agua fría con un poco de bicarbonato de sodio en la zona afectada. 
En caso de picaduras de abeja, retira el aguijón con unas pinzas y coloca hielo. 
En caso de mordedura de perro o rata, lava con agua y jabón neutro y acude al médico. 
Sí hay síntomas como hinchazón en párpados o lengua, adormecimiento de alguna parte del cuerpo o dificultad para respirar, acude al médico de inmediato.

Intoxicaciones

Reacción alérgica o envenenamiento en el cuerpo por causa de algún medicamento, sustancia o alimento. 
Síntomas
Hinchazón, dificultad para respirar, sudoración, vómito, diarrea, náusea y/o fiebre.

En caso de haber ingerido alguna sustancia tóxica evita provocar el vómito o darle agua, ya que esto puede dañar más sus órganos internos. 
Traslada de inmediato al bebé al hospital o clínica más cercana. 
Lleva contigo el envase y/o la sustancia que ingirió.

Ahogamiento o atragantamiento

Obstrucción en la garganta por un objeto o alimento que impide la entrada de aire a los pulmones. 
Síntomas
Dificultad para respirar y hablar, labios azulados, tos constante, silbido al respirar.

Coloca al bebé boca abajo sobre tus piernas de manera que la cabeza quede más abajo que el tronco, sujétalo de las piernas y dale golpes en la espalda.
Si con esto no expulsa lo que se le ha atorado, dale la vuelta para que quede con la misma inclinación, pero con el pecho de frente y con la cabeza de lado, presiona con los dedos índice y medio cinco veces en el centro del pecho. Lo que se busca con cada empujón es que el aire suba por la tráquea y despeje las vías respiratorias. 
Si persiste la obstrucción, ábrele la boca con una de tus manos, poniendo el pulgar sobre su lengua y los otros dedos bajo la mandíbula. Trata de ver y sacar lo que la asfixia usando el dedo índice de la otra mano como gancho. Si el objeto está profundo no intentes extraer nada, pues corres el riesgo de empujarlo más. Llévalo de inmediato al hospital más cercano.